La "historia sin fin" de los conflictos internos del MAS sumó esta semana dos nuevos capítulos: un presunto pacto del ala evista con Comunidad Ciudadana y Creemos para la reelección de Andrónico Rodríguez en la Presidencia del Senado, y el discurso del Presidente al inicio de su cuarto año de mandato, sobre las acciones evistas para desestabilizar a su Gobierno. Entre el 60% y el 50% de la población creen que el evismo tiene mayor músculo político y de movilización social que el arcismo. Creen además que el evismo logrará paralizar la gestión de Arce lo cual perjudicará a todo el país. Así, las pungas intra masistas resultan en un juego de "perder-perder". Pierde el ala arcista porque corre el riesgo que la gestión del Presidente sea vista como ineficiente. Pierde el ala evista que es caracterizada como una actor irracional a quien le interesa sólo el poder político a costa del bienestar del país.