Entre agosto y noviembre del 2023, hay un leve incremento de la insatisfacción con la situación general del país (del 40% al 44%), y con la situación económica (del 50% al 57%). Esta mayor insatisfacción ha significado que entre agosto y noviembre el Índice de Satisfacción haya disminuido levemente. Esta mayor insatisfacción con la situación económica podría fundarse en las presiones económicas de fin de año para las familias y en el incremento de algunos precios por las fiestas. Pero también puede significar que para más del 50% de los bolivianos no es suficiente la "estabilidad económica". Esperan signos de "reactiviación", de mejores ingresos y de mayores oportuniades de empleo, que hasta la fecha no se perciben. La estabilidad económica es importante para la sastisfacción ciudadana; pero tiene sus límites si no está acompañada del crecimiento económico.