Arce sugirió la jubilación política de Evo. "Arcistas" y "pititas" apoyan esta idea; pero por motivos diferentes. Los arcistas de clase baja creen que Evo aportó al país y que es momento de un "retiro digno". Los pititas de clases medias creen que Evo perjudicó a Bolivia y que por eso mismo debería retirarse de la política activa. Al frente de ambos segmentos está la base social del ex Presidente cercana al 20% y focalizada sobre todo en el área rural de Cochabamba, que apuesta por la continuidad de Evo en la política.